La alberca con mechones de cabello dentro, las escaleras sucias como de aceite o cosas ya muy viejas, el cuarto si bien parece limpio el suelo está súper sucio, el seguro secundario de la puerta no sirve por qué su orificio está tapado, el agua de la regadera apenas pasa por caliente, las cortinas rotas.
La señorita de la entrada Karely muy amable en todo momento, lo único rescatable.