En general fue una buena estancia. El check in y check out, fue prácticamente inmediato y no nos pidieron el depósito, por habitación, que no es de 100 usd, sino de 150 usd, según un letrero en la recepción, probablemente por que llevábamos el servicio prepagado. Este hotel ya vivió sus mejores años y se nota en el inmueble, pero es perfectamente funcional y limpio. Los dependientes son muy amables, pero no hablan nada de español. El hotel siempre estuvo lleno en nuestra estancia, a pesar de ello, en calma. En las habitaciones se escucha todo lo que pasa afuera, es mejor hospedarse en las habitaciones de arriba, solo que no hay rampa ni elevador. Para el desayuno, son muy puntuales, a las nueve levantan los alimentos d de la barra, que son ya de por sí limitados, se nota la inflación en los EEUU. En relación calidad-precio es una buena opción.