Las habitaciones son amplias, limpias y muy cómodas. El personal fue muy amable con nosotros, sin embargo, consideramos que hace falta staff en el hotel. Solo hay una persona atendiendo, por lo que los procesos para check in, estacionamiento, cobro, etc. no son muy rápidos. El hotel cuenta únicamente con dos cajones de estacionamiento y no hay valet parking. Como alternativa tienen un estacionamiento exclusivo para huéspedes, pero está a varias calles, lo cual puede resultar inconveniente si vas con maletas. En el cuarto nos recibieron con botellas de agua, chocolates y dulces, y las opciones del desayuno incluido son muy variadas y ricas. En general disfrutamos mucho nuestra estancia y sin duda volveríamos.