Los botones nos dieron buena bienvenida y recepción de equipajes. Pasamos a recepción/registro con ellos y para empezar en recepción no fueron nada amables a nuestro ingreso ,tratándonos como si estuvieran nefasteados y hacer como si nuestro check in fuera un gran favor que nos estuvieran haciendo , cuando es su trabajo explicar las cosas al ingreso y eso el huésped no tiene la culpa. Nos dieron una habitación en la primer torre que acababan de pintar y las personas que nos encontrábamos ahí nos empezamos a sentir mal por lo que solicitamos cambio de habitación a una que no tuviera Mal olor , una persona llamada Nicolás vía telefónica nos mencionó que nos darían un upgrade en compensación y que bajáramos a recepción , sin embargo al llegar nos dijeron que ellos no habían dicho tal cosa y que solo nos podían dar una habitación de la misma calidad , y solo estuvieron rebotando la responsabilidad con sus demás compañeros, terminamos aceptando una habitación igual en otro piso, aceptamos por qué no quisieron hacernos reembolso para poder hacer nuestra salidas del hotel más que con penalizaciones. En la recámara “nueva” no hubo agua caliente durante toda la estancia , cosa que se estuvo diariamente a las 6:00 am y decían que lo arreglarían y nunca quedó, se reportó nuevamente y no hacían nada , los pisos del baño estaban llenos de moho, hasta la puerta de salida tenía hongo. cucarachas en habitaciones y albercas , goteras por todo el hotel ,aire acondicionado descompuesto congre