El precio de la habitación es cara el tamaño pequeño de la habitación para 2 adultos y 2 niños, además teniendo en cuenta la zona donde está. Está muy alejado del centro y aunque el metro está relativamente cerca 10 minutos andando, es una zona muy solitaria, degradada y sucia.
El desayuno escaso en opciones, croissants dulces, pero no mucha opción y nada salado. Algunas fotos del alojamiento no corresponden con la calidad del mismo.
Es una buena opción para poder dejar el coche y coger el metro para ir al centro, pero por la noche no es agradable volver por lo solitario y degradado que está. Quizás la no sea insegura pero no caminas tranquilo al no ver a nadie por la calle.