El hotel es muy bonito, solo hubo un detalle con las toallas, no tienen suficientes, al momento de ducharme nunca me había tocado que no tuviera la habitación toallas, la solicité y tardaron mucho tiempo, el personal del restaurante no me atendió hasta dentro de más de 30 minutos, nunca se acercaron a traerme la carta, tuve que estar persiguiendo a los meseros, pésima atención del restaurante.