Cada uno que saque conclusiones cuando vaya a ese hotel, hay que felicitar al fotógrafo.
Habitaciones sucias, las bases de las camas , así como la puerta del baño, con salpicones y manchas, no se sabe de qué y mejor no investigar, el aire acondicionado en la segunda habitación no funcionaba y hasta que lo desconectamos olía a quemado, la ducha como moho en las juntas, el lavabo fuera del baño con el enchufe a escasos centímetros del grifo, armario para la ropa "ridículo" no mas de tres prendas, para dos personas no hay espacio para dejar la ropa y demás artículos, cada vez que tenias que entrar o salir de la habitación tenias que hacerlo a través del restaurante, entre las personas comiendo, cenando o desayunando, mucha alfombra, pero el suelo tiene agujeros, baldosas rotas. Algo positivo los camareros normal, desayuno cumple perfectamente con el entorno, la persona que nos atendió en recepción correcta, cualquiera de ella, pero la sorpresa es (ignorante de mí, europeo) que llegas y pagas además de lo pagado en la reserva. En resumen la experiencia en el hotel lo peor de todo, en los dias que fuimos a Orlando, estuvimos en el Rosen Centre y eso si es un hotel, y la diferencia de precio con el Ocean, no hace justicia a lo que ofrece Rosen y las habitaciones, respecto al OCean.