Nos pusieron en una habitacion en la planta baja, al lado de la entrada y de la recepción. Se escuchaba los portazos de la entrada y cada vez que entraba y salia alguien. Al igual que si habia añguien cocinando porque esta todo en la misma planta.
En la recepcion no habia nadie(menos mal por un lado) durante toda la estancia y me comuniqué con ellos por whatsap. Las toallas eran blancas pero tenian un aspecto desgastado y sucio y no hay servicio de limpieza de habitación. Tan solo vienen cada 3 dias a cambiar las toallas que en nuestro caso se retrasaron un dia. Pero ni vaciaron la papelera del baño..un poco dejado la verdad.
La cama es muy cómoda y las instalaciones de la habitación estan muy bien, con aire acondicionado, nevera y television(no iban bien muchos canales). Las sabanas estaban limpias y nuevas.