aspectos positivos: amabilidad del personal, habitación amplia (teníamos una habilitada y quizás por eso lo era, no lo sé) y tranquilidad del entorno.
Aspectos negativos: olor a rancio en la habitación, no hay enchufes en ninguna de las mesitas,las ventanas de mi habitación daba justo a la zona trasera de la cocina, con lo que era imposible correr la cortina y no encontrar a alguien a la otra parte de la ventana. Por supuesto esperé a que no hubiera nadie para hacer las fotos. Privacidad nula. Desayuno bastante justo ya que bajamos a las 9, se da desayuno hasta las 9,30 y ya no se repuso la bollería, por ejemplo, no quedaban ya de algunas cosas y así se quedó.