Visitamos Toulouse en un fin de semana frío, nublado y ventoso, así que agradecimos mucho pasar la noche en un apartamento bien equipado, con multitud de opciones para guardar cosas, una butaca muy còmoda, calefacción y ducha eficientes, vistas espectaculares y la posibilidad de poder tomar café a cualquier hora en la cafetería. Cualquier cosa que necesites, te asisten amablemente. Ubicación perfecta, sobre todo si se viaja en tren.