La habitación fue reservada para dos adultos y un menor. Pedimos un cambio de habitación porque ésta olía a humo de cigarro, lo cual nos fue negado por la recepcionista del turno nocturno, no fue empática. Solo había toallas de manos. La recepcionista quería cancelar la reservación, sin atender lo anteriormente solicitado.
Aunado, el personal no habla español, cuando en su página menciona que hablan tanto español como inglés.
El recepcionista del turno del siguiente día, hizo el cambio de habitación sin ningún problema, luego entonces la señorita que nos atendió el día de nuestra llegada, no quería hacer su trabajo y solo dio un pésimo servicio. Espero que hagan algo al respecto.