Un lugar con muchísimo encanto y tranquilidad, perfecto para desconectar. La atención es inmejorable, y queremos destacar a Solmer, que nos trató de diez en todo momento. Cercano, amable y siempre pendiente de cada detalle. Sin duda hizo que nuestra experiencia fuese aún mejor. ¡Recomendadísimo y con ganas de volver!