Casi no me gusta quejarme pero es necesario para que capaciten más a sus empleados , al llegar al hotel la señora Karina supervisora de recepción o algo así, nos trató súper muy mal, muy grosera, pienso que Ella estaba enojada por algo pero el joven Jesús de recepción y el señor bell boy salvaron el día , Ellos si fueron muy atentos .
Le falta mucho al hotel en comodidad y atención al cliente, buena ubicación , nada más.