De antemano quiero aclarar que es mi experiencia en particular y que lo que a nosotros nos pareció excelente a lo mejor a otras personas no. Me quedo con un excelente sabor de boca, desde que llegamos la atención muy cordial y eficaz, la habitación es lo que promete y la limpieza al 100%, el personal muy amable y dispuesto. En el restaurante solo desayunamos los días que estuvimos hospedados, pero todo delicioso. Creo que lo que más nos encantó fue la ubicación del hotel con la combinación de que ofrece una estancia perfecta. La zona en la que está es el centro a una cuadra y media de la alameda central en donde caminando un poco más está el palacio de bellas artes, la torre latinoamericana y unas calles más adelante se encuentra el zócalo. En un día puedes recorrer todos esos atractivos turísticos sin necesidad de tomar transporte público, claro hay que caminar jaja. Creo que es un excelente hotel si lo que quieres es estar en zona centro y que todo te quede relativamente cerca (six flags queda algo retirado, al igual que la basílica, pero no tanto como el primero, en ambos hay que agarrar transporte). No es un hotel caro a comparación de otros en la ciudad y eso fue lo que nos gustó, la relación precio-calidad-servicio está genial. Sin duda nuestra mejor opción y volveremos a ir en un futuro.