Un hotel bien ubicado, antiguo y por lo mismo lo estaban renovando en la parte del lobby. Lo malo es que no nos avisaron antes de nuestra llegada. Yo elegí este hotel por el desayuno incluido y por la renovación sólo ofrecían una bolsita con dos panecillos embolsados, un mini jugo en un platito, una barra de granola y una naranja. Soy alérgica al gluten y poco pude aprovechar. No les importó ni ofrecieron opciones. Fueron poco amables. Cuando llegamos se notó que la limpieza no se había hecho a conciencia pues había una cajita de audífonos a un lado de la cama en el suelo del huésped anterior, la secadora de cabello no servía. Un día no dejaron el tapete de toalla del baño al hacer la limpieza. Dejé propina para la camarista solicitando una toalla extra y no la dejó.
Hicimos el check out y dejamos el equipaje en resguardo, cuando llegamos a solicitarlo pedí un baño y me dijeron que no tenían por la remodelación, que me fuera a una cafetería cruzando la calle. La verdad en el área del lobby todo se veía empolvado, con un plástico mal puesto para dividir el área de trabajo. Todo amontonado y daba un aspecto desagradable, descuidado.
Sólo volvería por la ubicación y la posibilidad de hacer check in anticipado por 25 dolares. Creo que es el peor Hampton inn en el que me he hospedado.