Gran hotel, alejado de las zonas de ruido de San Antonio - Ibiza. Es un lugar para desconectarte y descansar. La atención de las chicas de recepción es insuperable. Ojalá el resto del personal aprenda de ellas, como por ejemplo las mucamas y el personal del restaurante/desayuno, que son poco amables y cero empáticas, por ellas, no le doy la máxima puntuación al hotel. Las habitaciones amplias y cómodas, nos encantó que tiene todo por separado, la ducha, el inodoro y el lavamanos. Además en nuestro caso incluía un mini patio grandioso. Destaco también el desayuno que brindan, es súper variado, el mejor que me comí en todo mi eurotrip. Si vuelvo a Ibiza, sin duda alguna me hospedo de nuevo acá.