Esta fue la segunda vez que me quedé acá y la verdad debo decir que quedé desilusionada, pues la limpieza es básica, y el desayuno deja mucho que desear, pues tienes que escoger qué vas a comer antes de las 22:30 pm del día anterior, pues lo llevan a la habitación, pero igual que la vez pasada, el desayuno llegaba frío.
Hay una construcción terrible, detrás del edificio, y empiezan a hacer bulla desde las 6:30 am. Lo otro es que la calle está totalmente destruida y no hay acceso en auto. Están haciendo trabajos de tubería, y nunca fui avisada. Si no fuera porque mi hermano me ayudó al momento del sacar las maletas a las 23:00 horas, a una calle contigua, no sé qué hubiera hecho, pues tengo un bebé y un niño de 4 años.
Lástima porque la zona es muy buena y tranquila.