Lugar mediocre, en teoria nos hicieron un upgrade pero no se notó, la habitacion antigua, baño tambien. al segundo dia de estadia al llegar a la habitacion la puerta estaba abierta y nadie supo decirme si el personal de limpieza la dejo abierta o si alguien entró, al otro dia quise dsifrutar de los promocionados masajes, les aviso que quiero un masaje para las 17hs, me dicen que ningun problema, que me avisan para confirmar, al no avisarme,16:45 llamo para saber y me dicen que vaya a las 17:00. 16:55 me avisan que la masajista se tuvo que ir.
lo destacable es el desayuno, que se sirve en el Hotel Iruña.
nada mas para decir, no volveré.